Viví en esta zona -en la calle Moreto- durante tres años y fue lujo en todos los sentidos. Salir y encontrarse con el Museo del Prado, sus jardines, el Jardín Botánico al lado, la iglesia de los Jerónimos, el parque del Retiro a pocos metros, la Casona del Retiro......y aún así, toda la tranquilidad del mundo. Era como vivir en un oasis. Estas cosas ocurren pocas veces en la vida y, cuando ocurren, hay que disfrutar cada minuto de ellas. Y eso fue lo que yo hice.
No hay comentarios:
Publicar un comentario