miércoles, 13 de abril de 2011

Yuri Knórosov: el descubrimiento de la escritura maya

                        Gracias por NO reproducir esta entrada al pie de la letra.

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Hace unos diez años, la historiadora Dra. Patricia Rodríguez Ochoa presentó los tres volúmenes de la obra “Compendio Xcaret de la escritura jeroglífica maya descifrada por Yuri V. Knórosov" en el Instituto Cultural Mexicano de Washington DC. Era la primera vez que yo escuchaba hablar de Knórosov.
Luz Estela Santos, la Consejera de Cultura, me la presentó posteriormente. Patricia llegó a ser una buena amiga y tuve ocasión de verla en México, tenerla de guía en la vista de las ruinas mayas y, tanto mi hijo como yo, ser invitados a pasar la Navidad con toda su familia. Mi recuerdo especial para ella porque ya no está entre nosotros.
El período clásico de la cultura maya se extendió entre los años 250 y 900. Los mayas nunca llegaron a estar políticamente unificados. Las ciudades-estado ocupaban lo que hoy es Guatemala, Belize, Honduras y las zonas de Yucatán y Chiapas.
La clave para llegar a la interpretación de la escritura maya viene del siglo XVI, cuando el fraile español Diego de Landa, primer obispo de Yucatán, elaboró un alfabeto que incluyó en su libro "Relación de las cosas de Yucatán". Este alfabeto fue la base para los estudios que realizaron más tarde.

En una entrevista hecha en el periódico El Universal de México en octubre de 1999 (*), Patricia Rodríguez Ochoa, relató su interés en editar el trabajo de Knórosov, investigador ruso, nacido en Ucrania en 1922 y quien desde muy joven se interesó por los estudios de lingüística y supo que existía en América una escritura no descifrada, que era la escritura maya.
Alumno de famosos lingüistas soviéticos, Knórosov estudió la escritura egipcia antigua, árabe antiguo, sánscrito, chino y japonés. Además, tenía un don natural para los estudios de lingüística comparada.
De la Biblioteca de Berlín sacó una copia de tres códices mayas y se la llevó a Moscú, donde trabajó infatigablemente y en condiciones adversas, en el desciframiento de la escritura maya. Muchos habían tratado de hacerlo antes que él.
Cuenta la doctora Patricia Rodríguez que en una ocasión le preguntó a Knórosov por qué nadie había podido descifrar la escritura maya. Su respuesta fue muy sencilla: "todos ellos son arqueólogos y yo soy lingüista".

La obra de Knórosov se publicó en 1963 en la Unión Soviética, con una segunda edición en 1975, pero nunca se publicó en Occidente, con la excepción de algunos extractos en revistas. Los investigadores occidentales decían que se basaban en él pero en realidad no conocían bien su método.
La historiadora Rodríguez Ochoa decía: "Hay muy poca la gente que conoce a Knórosov y casi nadie conoce su obra, a pesar de que los gobiernos guatemalteco y mexicano lo condecoraron en alguna ocasión. Como historiadora nacida en Yucatán, siempre había escuchado que la escritura maya no se podía leer. Fue mucho tiempo después cuando supe de la existencia de Knórosov y de su obra, pero también me di cuenta que casi nadie conocía al investigador ruso. Me impresionó tanto que pensé que debía hacer algo para editar su obra. Si el señor Knórosov descifró la escritura maya, tenía que hacer algo, era una cuestión de justicia".
EN 1993, tuvo lugar un congreso en México organizado por la revista mexicana "Vuelta" (fundada por Octavio Paz en 1976), y en la primera mesa redonda titulada "La resurrección de los mayas" estuvieron algunos epigrafistas y mayistas de renombre, pero nadie mencionó a Knórosov.

En 1995, Rodríguez Ochoa, supo que Knórosov había llegado a México por primera vez: "Pedí una entrevista con él porque quería conocerle. Fue ahí cuando le dije que iba a hacer algo para que su obra se conociera en México."
Rodríguez Ochoa puntualiza: "Su principal adversario había sido el investigador inglés, Erick Thompson, quien negaba la tesis de Knórosov de que la escritura maya era morfémico-silábica, creada en la etapa de desarrollo jeroglífica. Dicen que en un congreso en Europa, donde Knórosov dio a conocer los resultados de sus investigaciones, Thompson, se puso furioso. Sin embargo, a partir de ese momento, Thompson ya no pudo descansar y sistemáticamente empezó a atacarlo. Y es que, sin duda, cuando Thompson escuchó a Knórosov en aquel congreso, supo que tenía razón, pero no pudo aceptarlo."
PUBLICACIÓN DE LA OBRA DE KNÓROSOV EN MÉXICO
Después de conocer a Knórosov y decidir la edición de su obra, Patricia Rodríguez, buscó dinero por todas partes pero no lo consiguió. Hasta que un día vino a México la ayudante de Knórosov y comentó que unas personas del Grupo Xcaret querían editar la obra del investigador. "Me puse en contacto con ellos y determinamos que yo me haría cargo de la edición y ellos le pagarían al lingüista ruso durante un año para que pudiera terminar la obra."

Un año después, Knórosov, entregó el trabajo y empezó la labor editorial, sólo que no alcanzaban los recursos para una edición de lujo. "Después de tocar muchas puertas fue la Universidad de Quintana Roo la que decidió apoyar el proyecto junto con la editorial Vía Láctea."
Por fin, en marzo de 1999, el equipo de la Doctora Rodríguez Ochoa preparó una versión preliminar de l
a obra. "Al estar revisándola, sonó el teléfono y me informaron que Knórosov acababa de morir de neumonía en Mosc´. Sentimos mucho que no viera el libro terminado, aunque él sabía que se estaba editando. En una de sus últimas comunicaciones con nosotros nos dijo que deseaba morir en México".

La obra final está formada por tres volúmenes: el primero contiene el método de desciframiento y el catálogo de 1.035 signos, el segundo reproduce en color los tres códices mayas: Madrid, Dresde y París, y el tercero es una versión completa en maya antiguo y en español de los tres códices.
Después de una labor de varios años de trabajo, Patricia Rodríguez Ochoa, vio publicada la obra y, en mi opinión, recibió muchos menos reconocimientos de los que hubiera merecido.



Knórosov pudo salir por primera vez de su país en 1991 y viajó a Guatemala, donde el gobierno le otorgó la Orden de Quetzal. En 1994 recibió la Orden del Águila Azteca concedida por el gobierno mexicano.
El desciframiento de la escritura maya supuso que esta civilización pasara de la prehistoria a la historia.

(*) Entrevistadora de El Universal: Patricia Velázquez Yebra
http://www2.eluniversal.com.mx/pls/impreso/noticia.html?id_nota=1881&tabla=cultura Información: http://oncetv-ipn.net/sacbe/mundo/escritura/
http://letraslibres.com/pdf/3983.pdf (Entrevista hecha por Patricia Rodríguez Ochoa)
http://www.mayacopan.info/espanol-6-escritura.htm

4 comentarios:

  1. Ye bien interesante esta entrada. Felicidaes pol blogue Caxigalines.

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  2. disculpa si es interesante pero la duda es cual es el nombre de la obra y donde se podría conseguir?

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  3. La obra está compuesta por grande tres grandes volúmenes y se llama " Compendio Xcaret de la escritura jeroglífica maya descifrada por Yuri V. Knórosov". La Dra Ochoa los llevó a Washington para su conferencia -allí fue donde yo los vi- pero ella quería dar conferencias por todo el mundo de habla española para que se conocieran. Eran caros pero estaban extraordinariamente editados e impresos. Creo que CONACULTA puede saber algo.

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  4. Knorosov no ha sido reconocido por el racismo cultural con los pueblos y enemistad de Occidente con Rusia.
    Gracias donde se encuentre a Yuri. El mundo debería agradecerte y leerte.

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