viernes, 1 de enero de 2016

Margherita Sarfatti, la amante judía de Mussolini

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Casa natal de Margherita Sarfatti
Sabía muchas cosas sobre Clara Petacci, la última amante de Mussolini, pero cuando en EE.UU asistí a una representación teatral sobre Margherita Sarfatti, apenas conocía nada sobre ella.

¿Quién fue esta mujer judía e italiana cuyo nombre se ha desvanecido en la memoria colectiva?

Nacida en Venecia como Margherita Grassini en el seno de una rica familia judía de origen sefardita. Se casó a los 18 años con el abogado Cesare Sarfatti, de extracción socialista y también judío. Mujer muy culta y de gran erudición en el campo artístico, comenzó a escribir en el periódico "Avanti della Domenica" en 1902. Desde 1909 dirigió la sección de arte de "Avanti", órgano del Partido Socialista Italiano (PSI).
Cesare Sarfatti, Margherita y su hija Fiammetta
En 1912 conoce a Benito Mussolini. Entre ambos nace una simpatía que se transformará en un prolongado romance. Tal sentimiento acercará a Sarfatti a posiciones cada vez más cercanas a las de Mussolini,  hasta tal punto que en 1918, Margherita se convierte en redactora de "Il Popolo d'Italia", periódico fundado y dirigido por el futuro Duce.
Mussolini y Sarfatti
Mussolini tuvo decenas de amantes, pero Margherita no fue una más: su relación duró dos décadas y estuvo siempre marcada por la polémica. Aunque el Duce solía decir: "Los judíos son mis peores enemigos" y se había opuesto a que su hija Edda se casara con uno de ellos, no los persiguió al principio y mantuvo como ministro de Finanzas al judío Guido Jung hasta 1935. Mussolini estaba casado legalmente con Rachele Guidi, con quien tuvo cinco hijos.


Una vez que Mussolini llegó al poder, en 1922, Margherita Sarfatti se convirtió en la mujer más influyente de Italia: crítica de arte, escritora, mujer de extraordinaria cultura y gran personalidad, Sarfatti, fue para muchos la única persona capaz de dominar a Mussolini.
 Pero también tuvo un gran papel en la persecución y violencia contra los intelectuales y trabajadores opuestos al régimen.

En 1924 se queda viuda de Cesare Sarfatti y a partir de entonces se dedica a escribir una biografía de Mussolini, la cual se publica inicialmente en 1925 en Inglaterra con el título "The life of Benito Mussolini" y al año siguiente con el título de "Dux".
Aunque hasta después de su exilio, ella nunca ejerció como judía, cuando el Duce implementó las leyes promulgadas por el nazismo para eliminar a la población judía, Margherita Sarfatti tuvo que exilarse. Su hija Fiammetta, convertida al catolicismo, permaneció momentáneamente en Italia con su marido  y luego lograron escapar a la deportación. Su hermana fue deportada al campo de concentración de Auschwitz, donde muere. Fue una tremenda ironía para quien había sido una importante difusora de las ideas del fascismo y que, de pronto, se convertía en su víctima. Quedó entre dos fuegos: el odio de los antifascistas y el odio de los fascistas que no le perdonaban su origen judío.
En su exilio recala primeramente en París y se encuentra con Alma Malher, quien también había huido de Austria con su nuevo esposo, el poeta judío Franz Werfel. Alma escribió entonces: "Cuando la vi por primera vez, era la reina sin corona de Italia; ahora es una mendiga real en el exilio. Viene a visitarnos con frecuencia y su vitalidad anima a todos los emigrados". Margherita Sarfatti frecuentaba a Jean Cocteau y otros personajes ilustres. Dio numerosas conferencias en el Louvre ya que hablaba un perfecto francés y era una entendida en arte.
Desde 1928 a 1945 Argentina recibió alrededor de 45.000 judíos europeos. Margherita Sarfatti fue una de los, aproximadamente, mil judíos italianos que llegaron a la Argentina a partir de 1939 (*), año en que ella llegó al Río de la Plata.
Se instala primero en Montevideo donde trabaja como periodista y crítica de arte en "El Diario". Más tarde, Sarfatti, pasará a residir en Buenos Aires. En total 7 años de exilio. 
En la Argentina, la esperaba Victoria Ocampo, gran promotora cultural. El vinculo con Ocampo la lleva a frecuentar a los principales escritores del país como Jorge Luis Borges y Adolfo Bioy Casares, además de republicanos españoles exiliados como Rafael Alberti y Arturo Cuadrado.....¡a pesar de que eran de idelogía contraria! Y es que Margherita Saffarti intentó justificar su pasado fascista y desde su exilio sí reivindicó su condición de judía.

Margherita Sarfatti y Victoria Ocampo tenían más de un punto en común, aunque Ocampo no era judía. Las dos eran hijas de familias ricas y de niñas habían sido criadas alejadas del contacto con las clases menos privilegiadas. Hablaban varios idiomas desde pequeñas y eran rebeldes y feministas. Las dos ocuparon roles que no eran los que correspondían a la mujer en aquella época. Con un fuerte deseo de liberarse de la opresión familiar, las dos se casaron muy jóvenes y fueron mujeres adúlteras cuando esto aún se consideraba un escándalo.
En julio de 1947 Margherita Sarfatti, con 67 años, regresó a Italia. Allí, se convertiría en un personaje incómodo, demasiado próxima al antiguo régimen. En 1961, cuando murió en su casa, cerca de la frontera con Suiza, los italianos ya habían condenado al olvido a la que supo ser la reina sin corona del fascismo.

En cuanto a los judíos que se quedaron en Italia, muchos de ellos fueron deportados a los campos de exterminio nazi y más de siete mil de ellos murieron allí.

LA PELÍCULA QUE NARRA LA PERIPECIA AMERICANA DE MARGHERITA SARFATTI
La actriz estadounidense Susan Sarandon interpretó el papel de Margherita Sarfatti en la película "Cradle Will Rock" (1999) -estrenada en español con el título de "Abajo el telón"-  escrita y dirigida por Tim Robbins. Sarandon comentó acerca de su papel:

Margherita es una figura histórica de primera línea. Fue la amante de Mussolini y estuvo sumamente involucrada en el origen de los movimientos artísticos italianos. Fue mecenas de los nuevos pintores en Italia. Vino a los Estados Unidos para vender la imagen de Mussolini entre los norteamericanos, y lo hizo a través de la columna de "Hearst" buscando finanaciación para la Guerra y tratando de poner al gobierno americano de parte de Mussolini. Incluso llegó a ser recibida en la Casa Blanca por el presidente Franklin Delano Roosevelt. Se codeó con todos los norteamericanos ricos de aquella época. Y lo complicado de todo esto fue el hecho de ser judía, y  de que no se daba cuenta que, en realidad, estaba propiciando su propia crisis, que a la postre la hizo huir de su país para vivir en Paris, Uruguay y Argentina durante algunos años. No tengo idea si ella era realmente fascista, o si realmente creyó que había una manera de dormir con Mussolini sin ser acusada de culpable. Pero terminó sus días en una posición sumamente incómoda.
(*) La población judía en la Argentina es la más grande de América Latina y la sexta más grande del mundo fuera de Israel. Al año 2006 se calculaba una población de alrededor de 184.500 judíos. La cultura judía ha realizado y continúa realizando aportes considerables a la cultura argentina, en las ciencias, el arte, la música, el humor y los valores. A modo de ejemplo, uno de los tres premios Nobel de ciencias con que cuenta el país, César Milstein era judío. La música y los músicos judíos desempeñaron un papel fundamental en el desarrollo del chamamé, estilo folklórico de la Mesopotamia argentina (provincias de Misiones, Corrientes y Entre Ríos).

Sources:
http://www.letraslibres.com/index.php?art=12651
http://www.daia.org.ar/Site2009/ces/PDF/informe_antisem_2002.pdf

4 comentarios:

  1. Hola Eva!..Excelente!..Mil gracias por dejarme leerlo! ;)..Johana Nobles..Latinas en Shanghai.

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  2. Muy interesante Eva! Gracias por enviarmelo. Con suerte lo podré enlazar con mi tema pendiente de los judios en Valencia.Un abrazo! Nacho

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  3. En realidad, el número de judíos italianos llegados a la Argentina entre 1938-1942, fue de alrededor de 2.000.
    Sobre Margherita Sarfatti, les recomiendo un libro escrito por el argentino Daniel Gutman: "El amor judío de Mussolini".

    La felicito por el texto.

    Un saludo

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  4. Muchas gracias. La información que yo tengo sobre el número de los 45.000 judíos llegados a Argentina entre 1930-1945 la obtuve del informe sobre "Antisemitismo en la Argentina 2002", que puede ver en el siguiente URL:
    http://www.daia.org.ar/Site2009/ces/PDF/informe_antisem_2002.pdf

    Sé que hubo años difíciles para la emigración judía como1932-36 y 38.
    Nuevamente, muchas gracias por su comentario.

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